Delante de
tí, delante de mí, delante de todos-as está la Vida que llama... Solo tienes
que elegirla para vivir.
Aprender a
vivir escuchando la Voz que la alimenta, acogiendo el amor que da sentido y
poniendo nuestros pies y nuestras manos allí donde la vida está amenazada, para
cuidarla, alimentarla y hacerla crecer...
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